Regreso a las fuentes o el viaje a Federación
Hace mucho, pero mucho, que no entraba al blog a escribir. El último post fue en el año 2020, durante la pandemia, y desde ahí en más la vorágine de la rutina y, por qué no, la procrastinación me hicieron dejar de lado a EsosLugares.
Hace tiempo que buscaba un momento, y un motivo, para hacer un post y me parece que nuestro último viaje es una buena excusa para retomar la escritura en el blog. Asi que vamos con eso porque, además, en unos días tenemos otro viaje que también traerá seguramente cosas acerca de las cuales escribir.
En la salida de la pandemia, allá por el año 2021, teníamos ganas de despejarnos un poco al menos por algunos días y buscando destinos posibles decidimos ir a Entre Ríos, Argentina, con la idea de conocer alguno de los parques acuáticos presentes en algunas de las ciudades de esta provincia. En resumidas cuentas, nos decidimos por la ciudad de Concordia para hospedarnos y uno de los 4 días que pasamos allí fuimos al parque acuático de las Termas de Federación. Mis hijos quedaron tan encantados con el lugar que, dos años después, en octubre de 2023, decidimos hacer una nueva escapada para visitar el parque. Sobre este último viaje es que quiero hablar.
En un primer momento la idea fue repetir por completo el viaje previo, hospedarnos en Concordia e ir uno o dos días a las Termas de Federación, pero no encontramos lugar en el hotel de Concordia donde habíamos estado (el hotel Hathor Concordia, que por cierto tengo que recomendar encarecidamente). Entonces, pensándolo bien, era mejor idea alojarse directamente en Federación y evitar la hora de viaje desde Concordia de ida y de vuelta.
En Federación después de una ardua (?) búsqueda elegimos el Terrazas de la Costa Apart Hotel (https://www.terrazasdelacosta.com.ar/). Este apart tenía mas o menos lo que buscaba, un departamento con cocina completa, pileta, buenas calificaciones en general y estaba justo frente al ingreso del parque acuático de Federación. Otro punto que me interesó mucho es que tenía un parque muy, muy grande y salida directa al río (aunque atravesando una tranquera).
¿Dije que el hotel tenía pileta? bueno si, la tiene. Pero está habilitada solo en verano, así que no pudimos usarla.
Y ¿por qué me parecería bueno que tenga salida al río? bueno, en mi mente estaba la posibilidad de acercarme a la orilla del río al atardecer o de noche para sacar fotos. Finalmente la zona de río no era tan fotogénica y no pude aprovechar la ubicación como lo había pensado. A favor del lugar está el hecho de que después de muchísimos años volví a ver cientos de luciérnagas por las noches.
Lo que sí se pudo cumplir fue con el plan de ir al parque acuático, del cual escribí en este post. Llegamos un sábado y nos volvimos el miércoles siguiente, así que estuvimos tres días y medio en la ciudad de los cuales dos y medio pasamos por el parque. Incluso el último día, con una temperatura de solo 14 °C, fuimos al parque acuático pero hacía demasiado frio así que nos quedamos en las piletas de las termas que, con el agua a 35 °C, estaban ideales. Y para mejorar aún mas las cosas, en la pileta descubierta a la que fuimos estábamos solos, literalmente. El clima era muy malo pero era nuestro último día y el parque está abierto con cualquier clima excepto si hay tormenta eléctrica.
Detalle clave, las Termas de Federación son de gestión municipal y eso hace que el valor de la entrada sea bastante accesible. En particular, si hablamos del parque acuático que está dentro del complejo, el precio de la entrada (incluido en el ingreso a las termas) es mucho mas bajo que el de otros parques acuáticos que hay en Argentina, como por ejemplo el de Mar del Plata. A noviembre de 2023 la entrada general costaba $ 3400 y para los menores de 1 a 12 años costaba $ 1650. Esto habilita a pasar el día completo de 08hs a 20 hs (el parque acuático cierra a las 17).
En el medio, visitamos la Reserva Natural Chaviyú, un lugar muy lindo a orillas del río donde se puede pasar el rato entre enormes eucaliptus. Lamentablemente había llovido recientemente y encontré una parte del camino semi inundado en el que preferí no probar las NO habilidades 4×4 del auto porque, la verdad, en todo el camino no nos cruzamos a ninguna persona y si me quedaba en el barro las cosas se iban a poner feas.
También conocimos el Museo Acuario de Federación, un lugar que a priori puede parecer poco atractivo pero, al menos para mi, resultó una grata sorpresa. Además de conocer la historia de la ciudad de Federación, ligada negativamente a la represa de Salto Grande y más aún a las malas políticas que vienen desde hace muchas décadas, vimos un par de carpinchos que se me mueven a sus anchas por el lugar y se acercan a la gente como si fuesen perros, un yacaré, tortugas de agua, un lagarto overo y otros pequeños animales propios de la región. Muy lindo realmente.
Las lluvias y el barro de las calles no nos permitieron conocer la antigua ciudad de Federación, la que quedó bajo el agua cuando se construyó la represa de Salto, pero la visita posterior al museo antes mencionado nos hizo dar cuenta que era casi imposible encontrar algo. La ciudad antigua había sido demolida por completo y solo quedan restos de cimientos de las casas que hubo en un momento.
Para el regreso la idea era aprovechar y pasar a conocer el Parque Nacional El Palmar. Pero al llegar pasaron dos cosas, la primera fue que en el ingreso me dijeron que estaban los senderos cerrados «en apoyo a la protesta de guardaparques de no se qué otro parque nacional». Y la segunda fue que 30 segundos después de que me digan eso, comenzó a llover como si no hubiese un mañana, lo cual definitivamente nos alejó de la posibilidad de conocer este parque nacional.
Pero no todo estaba perdido y la lluvia se detuvo a tiempo para tomar un desvío a la altura de Concepción del Uruguay y pasar a visitar el Palacio San José, residencia del General Justo José de Urquiza. Yo desconocía por completo la existencia de este lugar, fue mi mujer quien lo tenía en mente y la verdad es que fue una buena idea hacer esos kilómetros extra. El Palacio es hermoso, me quedé pensando lo que habrá significado para la época en el lugar dónde está ubicado. La entrada es gratuita, otro punto a favor.
Finalmente el cortísimo viaje llegó a su fin, con los chicos contentos por haber pasado horas y horas en las piletas y juegos del parque acuático. Un poco la idea era esa, que pueda disfrutar de unas cortas vacaciones porque en ese momento no era seguro que fuésemos a tener vacaciones en el verano.