Lidiando con el vuelo cancelado de Level
Ese viernes venía con mucha ansiedad porque al día siguiente viajábamos a Europa después de una planificación que comenzó más de un año antes. Eran todas risas hasta que pasadas las 23:00 de ese viernes 24 de agosto de 2018 recibo este fatídico mail:
Tranquilo, tranquilo, debe haber un error, pensé, solo tengo que verificar en la web de Aeropuertos Argentina 2000 cual es el horario de salida del vuelo.
Increíblemente la web de AA2000 no informaba cambios y el vuelo seguía en su horario normal. Pero no podía ser, ¿por qué, si no, me mandarían ese mail desde Iberia?.
Lo segundo que hice fue mirar en Flightradar si el vuelo que llegaba desde Barcelona estaba en viaje (si mi vuelo salía a las 12:00 pm del dia 25 de agosto, a la medianoche anterior ese avión debería estar en vuelo hacia Buenos Aires). El avión aun estaba en Barcelona. Me vuelo a fijar a las 02:00 am del 25/08 (no podía dormir) y el avión seguía en Barcelona. Era obvio que algo pasaba, el avión que debía estar volando a Buenos Aires para luego llevarnos a Barcelona, aun no había despegado de España.
No recuerdo si fue vía Flightradar o en la web de Iberia donde llegué a un punto en que hablaba de «problema mecánico». Bueno, ¿qué hacer entonces? Me dormí en el sillón (porque esa ansiedad no te la robo amigo) con la idea de despertarme temprano y ver en que estado estaban las cosas.
A las 7:00 a.m. del 25 de agosto me despierto y, con la ansiedad superando la altura crucero de cualquier vuelo comercial, veo en Flightradar que el avion AUN sigue en Barcelona, aunque en la web de Ezeiza no hay modificaciones en los horarios iniciales. ¿Qué hago? Se acabó, me voy a Ezeiza yo solo y veo que pasa.
Una vez en Ezeiza, en el mostrador de Iberia, hay un grupo de unas 10 o 15 personas esperando. Me acerco a preguntar y están por lo mismo que yo. Sale una persona y muy amablemente informa que efectivamente el vuelo de Level se reprogramó para 14 horas mas tarde, pero que quienes fuesen al aeropuerto serían reubicados, dentro de lo posible, en los vuelos de Iberia que salian a las 13:00 hs y a las 21:00 hs.
De repente, la mala noticia inicial tomaba un aspecto muy positivo. Salí rápido de Ezeiza y llamé a mi mujer para que vista a los chicos de tal forma de volver a Ezeiza todos para intentar meternos en el vuelo de Iberia de las 13:00 hs.
Llegamos al aeropuerto los cuatro, pero esta vez esas 10 o 15 personas en el mostrador de Iberia se convirtieron en unas 200 personas haciendo fila esperando que le cambien el vuelo. Esa ilusión inicial de viajar en horario se desvanece. Pero queda un as bajo la manga: el bebé. Le doy a Thiago a mi mujer y le digo «probá ir adelante y preguntá». Nadie le niega una respuesta a una madre con un bebé en brazos. El as dá excelentes resultados y nos atienden sin hacer la fila de 200 personas. Pero el vuelo de las 13:00 ya está todo ocupado. Nos pueden reasignar para el de las 21:00 hs. Por supuesto aceptamos, 9 horas mas tarde es mejor que 14. Y esas 14 tampoco estaban aseguradas.
Como era muy temprano, nos volvemos a casa. Nuestra familia muy agradecida por tener que volver a la noche a traernos de nuevo (porque en mi familia hay una regla implicita que indica que siempre alguien habrá disponible para irte a buscar o llevar a Ezeiza, y eso me incluye por supuesto).
Finalmente nuestro vuelo Buenos Aires-Barcelona por Level del día 25-08 que llegaba a Barcelona a las 05:30 am, se reprogramó por un vuelo Buenos Aires-Madrid-Barcelona con Iberia que llega a Barcelona a las 15:00 hs aproximadamente.
Teníamos un aliciente. Solo había pagado dos valijas con Level pero no la comida. Con Iberia tendríamos la comida incluida aunque la incógnita iba a ser cómo sería la asignación de asientos, considerando que el vuelo ya estaría bastante lleno desde antes.
Ese día evitamos que los chicos durmieran siesta. Algo fundamental para que lleguen a la noche con el nivel justo de cansancio y puedan dormir todo el viaje.
Volvimos a Ezeiza antes de las 18:00 hs con la idea de adelantarnos en el check in y al menos conseguir asientos contiguos. Estar junto a la ventana era ya un quimera a esta altura. Nuevamente utilizamos el recurso «bebe» y saltamos toda la fila para llegar al mostrador a despachar nuestras dos mochilas. Eso si, que quede claro, no es que hicimos una «avivada» para no hacer la fila, viajar con un bebe le da a la familia acceso prioritario a ciertos lugares del aeropuerto, como el check in o el embarque.
Efectivamente el vuelo iba a pleno producto de los pasajeros reubicados de Level, asi que luego de dar vueltas por la pantalla el gentil señor que nos atendió nos logró asignar en la fila 22 al medio, justo frente al galley (es decir, no teníamos asientos adelante). La ubicación es genial porque hay muuuucho espacio para las piernas en comparación con el resto de la clase turista, pero obviamente estábamos lejos de las ventanas. Al menos nos sentamos juntos.
Despegamos casi una hora mas tarde de lo previsto y al rato nos sirvieron la comida, la cual no habíamos pagado pero por ser Iberia estaba incluida. Y con eso, que es poco, me quedo. Como viajando con Level íbamos a llegar a Barcelona a las 05:30 am, yo había pagado la noche del hotel para poder ingresar bien temprano por la mañana y no tener que esperar al horario normal de check in de las 14:00 hs. Pero al cambiarnos el vuelo, llegamos al hotel como a las 17 hs. Es decir que pagué una noche de hotel de mas inútilmente, pero al menos nos dieron «gratis» la comida del avión.
Conclusión: si hubiésemos ido a Ezeiza en la mañana temprano o, incluso, apenas recibí el mail de reprogramación, quizas nos ubicaban en el vuelo de Iberia que salía una hora después del de Level. Por supuesto no había forma de saberlo en ese momento, pero me sirve de experiencia para la próxima. Quizás ante una cancelación no es mala idea ir rápidamente al aeropuerto para al menos intentar ser de los primeros en «reclamar», siempre en buenos términos, alguna solución.
Se reclama x esa noche pagada d mas o las 14hs de reprogramación?
Hola Matias, la verdad? no reclame ni por una cosa no por otra. Estabamos recien comenzando el viaje y ni se me pasó la idea de hacer el reclamo, aunque bien podria haberlo hecho porque la reprogramacion fue por culpa de la empresa. Saludos!